viernes, 20 de mayo de 2011

Sí, quiero un parto respetado

“Parir como quieras, donde quieras y con quien quieras” es el lema del Ministerio de Salud en la semana –del 16 al 23 de mayo– en donde se conmemora la Semana Mundial de Parto Respetado y se quiere difundir entre las mujeres y sus familias cuáles son sus derechos en el momento de dar a luz. “El parto comenzó a realizarse en hospitales a principios del siglo XX para disminuir la mortalidad maternoneonatal, pero se instaló la idea de que se trataba de algo parecido a una enfermedad. Las familias y las mujeres perdieron protagonismo. El parto se transformó en ‘un acto médico’, cuyo significado científico dejó de lado otros aspectos esenciales. El equipo de salud pasó a ser el eje de las decisiones y comenzó a usar en todos los casos tecnologías y procedimientos destinados a los embarazos de riesgo. Esto fue alejando a las madres del parto natural sin que se lograse una mejora en los resultados perinatales”, describe la cartera sanitaria.

“La forma en que las mujeres parimos ha sido intervenida por el hombre desde hace ya muchos años. De la mano del avance de la tecnología y la práctica médica, el proceso del parto y nacimiento se fue alejando de aquel espacio privado de la mujer, parte fundamental de su vida sexual, y se fue convirtiendo en un proceso digitado y medicalizado que, muchas veces, en lugar de devenir en mejores condiciones para la salud de la mujer y la del recién nacido resultó de gran perjuicio. La cesárea se convirtió en una epidemia que amenaza la vida de las mujeres, ya que el riesgo de muerte se incrementa de 7 a 10 veces con respecto del parto vaginal. En este sentido, la Organización Mundial de la Salud (OMS) establece que el índice de cesáreas debería oscilar entre el 10 y el 15 por ciento del total de nacimientos. Pero esa cifra es ampliamente superada en nuestro país”, subraya la periodista especializada en maternidad y primera infancia Mariela Franzosi.

En 1985, la Organización Mundial de la Salud (OMS) realizó una reunión en la ciudad brasileña de Fortaleza y de ese encuentro surgió la declaración “El nacimiento no es una enfermedad”, que inició el proceso de transformación del modelo de atención, describe la cartera sanitaria. En Argentina, la ley 25.929 sobre Derechos de Padres e Hijos durante el Proceso de Nacimiento fue aprobada el 26 de agosto de 2004, pero aún no tiene reglamentación. Por otra parte, la Ley para Prevenir y Erradicar toda forma de Violencia hacia las mujeres incluye la Violencia Obstétrica que es ejercida contra la mujer cuando no le brindan un trato respetuoso antes, durante o después del parto, cuando abusan de las medicinas innecesarias para acelerar el parto, cuando no le consultan acerca de las prácticas que van a realizar sobre su propio cuerpo, cuando la tratan como a una enferma; cuando no le permiten estar acompañada o cuando no la atienden rápido, bien y de manera confidencial en una situación post-aborto.


Más información: Línea de Salud Sexual (orientación y denuncias) 08002223444


Fuente: http://www.pagina12.com.ar/diario/suplementos/las12/13-6515-2011-05-20.html


Imagen tomada de la página: http://www.partolibre.com.ar/Principal.html